Los días fértiles del ciclo menstrual son aquellos que están próximos a la ovulación.
Pueden ser los días anteriores a la ovulación o los días posteriores.
Toda mujer responsable debe reconocerlos.
Esto le permitirá saber que posibilidad existe de un embarazo cuando ha ocurrido una relación sexual desprotegida.
Conocer los días fértiles del ciclo menstrual puede ayudar a evitar un embarazo no deseado o no planificado.
También puede propiciar el embarazo deseado si la pareja refuerza, por así decirlo, la frecuencia de las relaciones sexuales durante esos días.
Los días fértiles del ciclo menstrual. Signos que avisan a la mujer
A grandes rasgos podemos definir cuatro signos
- Aumento de la libido (deseo sexual).
- Cambios en las características del flujo vaginal.
- Ligero a moderado dolor en el vientre
- Aumento discreto de la temperatura corporal.
- Cambios en la piel.
- Aumento de la disposición sexual en presencia de la pareja.
Aumento de la libido
El aumento del deseo sexual o libido es uno de los signos más evidentes.
Cuando la mujer transita por la etapa en que el ovario está próximo a liberar un óvulo las hormonas producen una serie de cambios en la mujer.
En la hembra de cualquier especie animal esto propicia que el macho se acerque.
Por tanto es parte de la memoria biológica de los seres vivos para perpetuar las especies.
Cambios en las características del flujo vaginal
El fluido vaginal de una mujer sana en cualquier otro momento del ciclo es una secreción escasa, blanquecina, sin olor.
Cuando existe infección de cualquiera de los órganos ginecológicos esto cambia.
El flujo vaginal tendrá diferentes características según el germen que cause la infección.
Durante los días fértiles del ciclo menstrual el flujo vaginal cambia sus características también.
Este se torna más abundante y transparente.
Alrededor de los días de probable ovulación el flujo vaginal adquiere consistencia mucoide, como la clara del huevo.
Si se toma entre dos dedos al separarlos se mantiene íntegro, estirándose como una liga.
A esta característica se le llama filancia del moco, como se muestra en la imagen.
Figura.1
Cuanto más pueda mantenerse íntegro sin romperse mayor será la filancia.
En ocasiones se estira hasta 10 cm.
Esta secreción mucosa proviene del canal del cuello uterino. Por ello se llama moco cervical.
El hecho de que la secreción se transforme así permite que los espermatozoides atraviesen más fácilmente el canal cervical.
Gracias a ello pueden llegar a su encuentro con el óvulo.
Más adelante en el ciclo menstrual el flujo vaginal vuelve a tornarse escaso y poco fluido.
Otros signos que pueden avisar sobre los días fértiles del ciclo menstrual
Aumento discreto de la temperatura corporal
Para poder reconocer este signo es necesario saber la temperatura basal que tenemos en condiciones normales.
Esta puede oscilar entre los 35ºC y 37ºC de temperatura.
Se medirá siempre en la mañana, antes de levantarse de la cama, con un termómetro oral.
Se apuntará en un calendario o gráfico según se prefiera.
La primera toma de temperatura se hará el primer día de la menstruación y la última toma el primer día de la próxima menstruación.
Así se podrá contar con los datos de la variación de la temperatura basal durante el ciclo.
Se podrá observar que en determinado momento del ciclo, la temperatura tiende a caer medio grado aproximadamente.
Después tiende a subir hasta un grado por encima de la temperatura basal volviendo a su normalidad.
Ese aumento corresponde al momento en que el óvulo ha sido liberado.
En caso de que no ocurriera ovulación no se observará ninguna variación en la curva de temperatura basal.
Cambios en la piel y el pelo
La piel de la mujer así como el pelo durante los días fértiles del ciclo menstrual, tienden a tornarse más sedosos y brillosos, “atractivos” a la mirada.
Esto ocurre debido a las hormonas y es parte de los trucos con que la naturaleza obsequió a los seres vivos para atraer al sexo opuesto.
De esta manera se propicia la unión sexual y por consiguiente la fecundación.
Se garantiza así la reproducción y con ello la supervivencia de cada especie.
Aumento de la disposición sexual en presencia de la pareja.
Durante los días fértiles la mujer suele ser más receptiva ante la demanda de sexo de su pareja.
El cerebro inferior que rige en los animales es el encargado de favorecer la atracción sexual pura.
El cerebro humano digamos que alrededor del momento de la ovulación permite a esta parte del cerebro tomar el control.
Así prima la relación macho-hembra.
Por eso podemos observar que aumenta la sensibilidad al tacto.
La detección subconsciente de las feromonas se incrementa a través del sentido del olfato.
Hay una mayor atención hacia los puntos que despiertan sensaciones eróticas recibidas a través de la visión.
Entre estos puntos gatillo se encuentran los glúteos y los músculos de la espalda y brazos del hombre.
También tienden a hacerse más sensibles zonas del cuerpo femenino como el cuello, las mamas, las caderas.
Apuntes aparte.
No obstante estar todos estos signos presentes durante la vida reproductiva de una mujer, no son todas las que son capaces de percibirlos.
Se necesita ser observadora y conocer muy bien el cuerpo.
Estar al tanto del comportamiento de este a lo largo de cada ciclo permite construir un esquema particular que sirve de patrón menstrual.
De esa manera en determinado momento podrá advertir cualquier cambio que ocurra con respecto a este.
Esto suele ser muy útil en infinidad de situaciones.
La observación de nuestro organismo puede ser una forma natural y sabia de lograr con éxito un embarazo en el justo momento.
Así es útil también para establecer el periodo de “peligro” para cada mujer más allá de la simple calculadora de días fértiles.
Unido a otro método anticonceptivo es infalible cuando aún no es el momento de traer niños al mundo.
Aunque actualmente contamos con los test de ovulación que son muy eficaces, conocer los síntomas que acompañan a los días fértiles del ciclo menstrual será además de útil, interesante.
