Los implantes dentales son hoy una realidad.
Hace unas décadas solamente se contaba con las conocidas prótesis removibles.
No obstante no resulta muy fácil acceder a los implantes dentales.
El costo es elevado para muchas de las personas que cuentan con salarios medios.
Un implante dental se puede hacer en toda la boca o parte de ella para recuperar la dentadura.
Los implantes dentales son hoy por hoy una opción muy atractiva para el ser humano.
Cuando se necesita hacer un implante dental lo mejor es siempre acudir a una clínica de confianza, bien equipada, con tecnología moderna.
Esta además debe contar con un equipo de profesionales especialistas en implantología dental de calidad reconocida y altos valores humanos.
Qué son los implantes dentales
Los implantes dentales son piezas dentales sembradas o implantadas en el lugar donde ya no existen.
También se utilizan para reemplazar los originales por decisión del usuario o porque las piezas están en muy mal estado.
Estos implantes son raíces artificiales fabricadas de diversos materiales, como titanio, carbono, cerámica y otros materiales.
Los materiales utilizados son bien aceptados por el organismo.
Actualmente podemos contar con técnicas para prevención, tratamiento y reconstrucción de piezas dentales originales dañadas.
Ello contribuye a una considerable disminución de las molestias que provocan los tratamientos estomatológicos tradicionales.
Se ha observado una tendencia a la reducción de costos o financiación de los servicios.
Esto está dado en parte porque ya han pasado unos años del inicio de esta técnica y porque la competencia lo impone.
Ventajas de la implantología
Es imprescindible que quien va a recibir el implante dental ostente una buena salud del tejido óseo en el cual quedan fijados estos.
Pueden servir para facilitar la realización de puentes sobre estos a la hora de sujetar prótesis incluso totales.
La implantología dental que es como se conoce esta especialidad, le devuelve a la boca su alud.
Favorece su estabilidad, funcionalidad y estética.
Ello aporta al paciente una mejor calidad de vida tanto física como psíquica.
Los implantes dentales se realizan en tres fases después que se estudia el candidato.
Hay que determinar que este cumple con los requisitos de salud de los tejidos bucales para recibir las piezas artificiales.
Fases
- Fase inicial
Se realiza el estudio radiográfico entre otros estudios.
Además se establece la guía quirúrgica y una especie de simulación en modelo encerado para lograr el mejor resultado.
- Fase terapéutica
Comprende etapas como la colocación de los implantes dentales y el periodo de inmersión.
Este proceso puede tardar hasta 6 meses por ser el maxilar un hueso esponjoso.
En este tiempo se realiza el seguimiento a través de radiografías observando el proceso óseo integrador.
Luego se determinará el tipo de prótesis a utilizar.
- Prótesis fija sobre implantes.
Las prótesis implanto-soportada constan de una estructura protética fijada mediante tornillos o cementadas en los implantes que se han colocado previamente dentro de los huesos maxilares.
- Prótesis híbridas sobre implantes.
Algunas prótesis combinan la fijación de los implantes con la superficie de la mucosa de la encía para ajustar la prótesis.
Se aconsejan en pacientes con una reabsorción ósea considerable.
- Fase de control
Inicialmente los controles se realizan cada 6 meses y después anualmente.
Estos controles comprenden radiografías, verificación de la estabilidad del implante y salud de los tejidos alrededor del mismo.
A través de los implantes dentales se puede obtener o retomar una sonrisa saludable.
En consecuencia la salud general del organismo se verá ostensiblemente beneficiada.
